VI Aniversario - Cohibas por poemas - Burkina the revist

VI Aniversario – Cohibas por poemas

No me he olvidado, ni lo voy a dejar de lado, aunque no sé cuánto entusiasmo está despertando en vosotros este viaje al pasado… El VI Aniversario de Burkina, camino de las 1001 entradas. Este descenso a los infiernos en que Orfeo, es decir, el poeta, en vez de rescatar a Eurídice se está encontrando con Eufemio. Entrada 921, hoy, sin mirar atrás, me he traigo a un verdadero poeta, a uno bueno de verdad, Álvaro Muñoz Robledano, y una iniciativa que empezamos juntos: «Cohibas por poemas«.

Publicada el 2 de marzo de 2016, os voy a decir algo de Álvaro: firmas las mejores reseñas de tabacos que podáis leer en la revista La Cava de Cigarros. Le voy a llamar hoy mismo.

Aquí tenéis la entrada. Tal cual.

COHIBAS POR POEMAS

Si les digo que, en una ocasión, fumé un Cohiba Lancero que perteneció al rey Hassan II de Marruecos, ¿alimento demasiado su mitomanía? No es coña. Alguien lo había sacado de su humidor y acabó en mis manos. Me supo muy rico, no tanto por el matiz que hubiera podido aportarle el sátrapa alauí, como por quién me lo regaló y los otros dos señores que estaban presentes. Una grata sobremesa.

Mi hermano Luis me regaló una vez un Cohiba Lancero (ya ves, bro, que no lo he olvidado) y me supo igual de bueno. Puede que más. Me acuerdo que me lo fumé el día en que Florencio Giménez Caballero y la Asociación Vitolfílica de Madrid le organizaron el homenaje a Raimundo de los Reyes en el paseo de la Castellana.

El Lancero de Cohiba no es un cigarro de tiro fácil lo cual no quiere decir que no tire si no, como bien dice el maestro Ángel García Muñoz, que requiere su atención porque, si no, se apaga. Es un cigarro exigente.

El Lancero es a la literatura como la trilogia de los Snopes de Faulkner.

Sólo por esos dos, ya Cohiba Lancero está en mi top 10, porque lo tiene todo: sabor, aroma, equilibrio, fortaleza medida, formato y un baño de recuerdos muy gratos.

Todo esto viene a cuento de la celebración, en estos días, del 50 aniversario de la marca en el XVIII Festvial del Habano en Cuba y de la presentación de 50 humidores con 50 cigarros cada uno conmemorativos de tan especial efeméride.

¡Sólo 2.500 cigarros para todos! Empiecen a ahorrar.

Personalmente, no me gusta la estética del humidor, confeccionado con hojas de ligero de tabaco de Vuelta Abajo, ni creo que la imagen que han usado para la anilla sea acertada, pero eso es lo de menos.

La mitomanía no va conmigo. No me maté por fumar un Behike de aquellos primeros que salieron, pero comprendo muy bien la locura que desata esta marca con su prestigio mundial, porque Cohiba es el cigarro por antonomasia y si en eso lleva su premio, también su castigo: hoy por hoy son los puros más falsificados del mundo.

Cuando uno ve a alguien disfrutando de un Cohiba ya no sabe qué pensar: o es un sibarita, un entendido, alguien al que le gusta lo bueno de la vida de verdad… O es un farsante. Eche usted una olfateada: si el aroma del cigarro no es meloso, agradable, suave; si no es el Chanel nº5 de los puros, entonces es más falso que un político besando a una vieja.

Es el 50 aniversario de una enorme marca de cigarros, probablemente la número uno del mundo, y yo me quiero sumar por lo buenos ratos que su ajedrezado amarillo y negro me ha proporcionado. Tengo en casa guardado desde hace 15 años este Cohiba Espléndido (178 mm x 47) conmemorativo del 35 aniversario de la marca esperando su momento. Quizá sea este fin de semana.

[Aquí debo volver al presente, al 8 de marzo de 2022, para hacer una aclaración: me lo fumé hace dos años, durante el confinamiento duro. Llevaba en el humidor de casa desde 2001].

Y lo voy a hacer releyendo al mejor poeta vivo que conozco, Álvaro Muñoz Robledano, pensando en retomar esa iniciativa tan chula que debemos culminar antes de que el vitolario de Cohiba se multiplique por cuatro. Yo te regalo un Cohiba y tú le dedicas un poema.

Este fue para los Lanceros, un cigarro para releer el «Villorrio«, de Faulkner.

CORBIN, GEORGIA

Let us compare mythologies
(Leonard Cohen)

o volvamos allí en cada palabra
pronombres de calor
adjetivos oscuros repetidos
en los escaparates
en las viejas banderas
con las que no crecimos
que no son sino las pantallas cóncavas
de esta noche de julio
de esta conversación
mientras la copa suda con lascivia
como el extraño que se dirigió
a Camille Claudel diciéndole
me llamo Abe Snope
he oído que tienes
tierras para alquilar
aquellos ojos
intraducibles

2 comentarios de “VI Aniversario – Cohibas por poemas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio utiliza cookies para ofrecerle una mejor experiencia de navegación. Al navegar por este sitio web, acepta nuestro uso de cookies.