Falto Mentor y el recuerdo - Burkina the revist Maridajes

Falto Mentor y el recuerdo

Falto Mentor… Creo que es la primera vez que un cigarro me hace dudar en cuanto a su calidad. No porque no la tenga, sino porque se mezcla con emociones que permanecían ocultas o, al menos, adormiladas, que salen a la luz a cada bocanada y ese desdibujado recuerdo se va trenzando en uno, cada vez más nítido. Si tuviera que poner un ejemplo, pensaría en Ratatouille, película de animación que, recordarán, protagoniza un ratoncillo que anhela ser cocinero y hacia el final [SPOILER] hace llorar al rancio crítico de cocina por el recuerdo que le provoca el plato, llevándole a su niñez. Muy rollo Proust.

Volviendo al tema. El Falto Mentor, cigarro elaborado en La Aurora, cuya ligada ha sido diseñada el empresario portorriqueño Luis Falto, con la única asistencia del gran Manuel Inoa, no es que hiciese rodar lagrimones por mis sonrosadas mejillas. Pero me llevó a un recuerdo infantil que, por supuesto, tenía totalmente olvidado.

Luis Falto, propietario de la marca Falto Cigars

EL RECUERDO SUSCITADO

En la agenda cultural y de ocio de los cachorros santoñeses no había una gran actividad. Desde luego eran otros tiempos en los que los críos, sin apenas supervisión adulta, vagabundeábamos por el pueblo en busca de aventuras. Pero en el otoño se daba un hito anual que ninguno nos perdíamos: la poda de los árboles en el pueblo. De repente, ante nosotros, teníamos una cantidad de material de construcción a nuestra disposición que era imposible obviar.

No sólo cantidades ingentes de palos se postraban a nuestros pies, también de hojas. Hojas que se iban secando y estrujábamos en nuestras manos cuando estaban completamente secas haciéndolas añicos. Ese aroma, ese en concreto, es el que me apareció en la cabeza cuando puse el pie del Falto Mentor en la nariz. Esa hojarasca seca, intensa, fina y sutilmente elegante que es la que definía el cigarro.

CATA DEL CIGARRO

Desde luego, había más notas en este cigarro que tenía olvidado en el humidor desde hace cinco años, como cacao en polvo, pimienta blanca, suelo de bosque, miel, canela, piel de nuez o sésamo. Pero esas hojas secas que me fascinaron desde el principio, fueron en aumento durante la fumada, con una limpidez y una definición tan marcadas. Pero no sólo esta nota sino todas, en general, que es algo que no puede hablar mejor de la calidad del cigarro.

Los tabacos de Falto no están a la venta en España

Debió de ser un cigarro potente, pero los cinco años que estuvo añejando en mi humidor, más el extra anterior que declara la marca, lo han domado bastante. En origen debía de ser bastante bravucón pero ahora estaba redondo y aunque aún mostraba el ímpetu de su juventud, seguía siendo sabroso, muy tánico, pero una tanicidad más de polvo, tirando a seco y untuoso con una fortaleza del tabaco media a baja. Curiosamente había cambios de tercios no sólo de la intensidad de las hojas secas como he comentado, sino que de unas notas del primer tercio de pimienta blanca, tierra y almendra silvestre se daba paso a un café expreso, delicado con acento en la nota terrosa y las especias dulces que iban desarrollando poco a poco.

EL MARIDAJE

El vino que lo acompañó, cuya botella me terminé durante… No sé si llamarlo cata… fue el Montagny AOC 2017 de Joseph Drouhin, vino borgoñés de la zona de Côte Chalonnaise que  compré el año pasado en un viaje a Burdeos que hice por verano, cuando aún se podían hacer esas cosas alegremente y no fue excesivamente caro para ser un borgoña, de hecho creo recordar que rondaba los 15 euros.

Lo elegí porque necesitaba un vino con cuerpo e intensidad moderada y a su vez que respetase la delicadeza y edad de este cigarro, pero que le dotase de cierta untuosidad, acidez y fuese seco en boca. Desde luego me encantó y si me bebí la botella fue debido a este hecho y a sus 13 graditos de nada. Es un vino sencillo pero complejete con unas notas de manzana roja madura, piedra de rio, frutos secos tipo sésamo, melón, cierto deje amielado y floral, tipo acacia, que hicieron una delicia del maridaje por el hecho de respetar el cigarro y refrescar su vejez.

Vamos a hacer un bote para regalarle un cenicero a David

Ha sido una sorpresa de cigarro, muy positiva desde luego. Aunque he de decir que si este cigarro lo hubiese probado más joven, tengo mis dudas de haberlo disfrutado tanto por la intensidad que estoy seguro, debía de tener. Pero este detalle es bastante subjetivo y si eres amante de las emociones fuertes muy posiblemente lo disfrutarías por su altísima calidad y por su fortaleza. Pero no te lleves a engaño: este cigarro es potente por la suma de sus características, no simplemente porque la pegada sea alta, que por cierto no lo es.

NOTA DEL EDITOR: Falto es una marca privada que elabora La Aurora para el empresario portorriqueño, buen amigo y mejor persona, Luis Falto. Sus cigarros no están a la venta en España.

FALTO CIGARS

Otras catas de David Cagigas en «Mírame cuando te hablo»:

LATE HOUR: COMPLEJO Y DESCONCERTANTE

MARIDAJES LOW COST

MÍRAME CUANDO TE HABLO

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio utiliza cookies para ofrecerle una mejor experiencia de navegación. Al navegar por este sitio web, acepta nuestro uso de cookies.